Letra de El Para�so Perdido - Javier Krahe
Letra de canci�n de El Para�so Perdido de Javier Krahe lyrics
Hoy me ofrecen sus cadenas
con amor a manos llenas
o con cantos de sirenas
-eso, seg�n-
Evas de mucho calibre
para que un Ad�n no vibre,
hoy, que saben que ando libre
y al buen tunt�n.
Pero yo no tengo claro
que, una vez rotos mis lazos,
vuelva a pasar por el aro
y en nuevos brazos
menos a�n.
Por los brazos de una Eva
quiz�s vuelva, no lo s�,
quiz�s a�n haga otra prueba
pues, mire usted,
recuerdo que...
Casi, casi el para�so
era aquel discreto piso
donde esta mujer me quiso
y all� viv�
hasta que un d�a, tajante,
con su espada llameante
me arroj� al camino errante
fuera de si.
"En el �rbol de la Ciencia
falta un kilo de manzanas,
ya he perdido la paciencia
tu te lo ganas
�largo de aqu�!
y ll�vate a esa serpiente
que se las da de Sat�n",
me orden� alzando la frente
y en muy mal plan
de �ngel guardi�n.
Y adi�s al cuento de hadas,
https://www.coveralia.com/letras/el-paraiso-perdido-javier-krahe.php
adi�s, camisas planchadas,
r�os, montes y ca�adas,
adi�s, Ed�n.
Adi�s, �ngel, si supieses
cu�ntas noches hice eses...
pero pasados los meses
ya no soy quien
comet�a aquel alarde
entre suspiro y suspiro
de rematar cada tarde
d�ndome un tiro
aqu� en la sien.
Ni en la sien ni en los cojones
por decirlo pronto y mal
que hoy frecuento m�s colchones
que un semental
sentimental.
Lo cual no quita que es bella
entre querella y querella
y la quiero m�s a ella
que a las dem�s.
Lo cual no quita que ellas
tengan todas cinco estrellas
y las quiero m�s a ellas
que a las dem�s.
Perdone usted camarero,
se me ha cruzado alg�n cable,
ha sido usted muy amable,
ya no le quiero
molestar m�s,
me temo haberle aburrido
borracho y venga de hablar
de un para�so perdido.
Yo en su lugar
cerraba el bar.
�Taxi!, �taxi!
con amor a manos llenas
o con cantos de sirenas
-eso, seg�n-
Evas de mucho calibre
para que un Ad�n no vibre,
hoy, que saben que ando libre
y al buen tunt�n.
Pero yo no tengo claro
que, una vez rotos mis lazos,
vuelva a pasar por el aro
y en nuevos brazos
menos a�n.
Por los brazos de una Eva
quiz�s vuelva, no lo s�,
quiz�s a�n haga otra prueba
pues, mire usted,
recuerdo que...
Casi, casi el para�so
era aquel discreto piso
donde esta mujer me quiso
y all� viv�
hasta que un d�a, tajante,
con su espada llameante
me arroj� al camino errante
fuera de si.
"En el �rbol de la Ciencia
falta un kilo de manzanas,
ya he perdido la paciencia
tu te lo ganas
�largo de aqu�!
y ll�vate a esa serpiente
que se las da de Sat�n",
me orden� alzando la frente
y en muy mal plan
de �ngel guardi�n.
Y adi�s al cuento de hadas,
https://www.coveralia.com/letras/el-paraiso-perdido-javier-krahe.php
adi�s, camisas planchadas,
r�os, montes y ca�adas,
adi�s, Ed�n.
Adi�s, �ngel, si supieses
cu�ntas noches hice eses...
pero pasados los meses
ya no soy quien
comet�a aquel alarde
entre suspiro y suspiro
de rematar cada tarde
d�ndome un tiro
aqu� en la sien.
Ni en la sien ni en los cojones
por decirlo pronto y mal
que hoy frecuento m�s colchones
que un semental
sentimental.
Lo cual no quita que es bella
entre querella y querella
y la quiero m�s a ella
que a las dem�s.
Lo cual no quita que ellas
tengan todas cinco estrellas
y las quiero m�s a ellas
que a las dem�s.
Perdone usted camarero,
se me ha cruzado alg�n cable,
ha sido usted muy amable,
ya no le quiero
molestar m�s,
me temo haberle aburrido
borracho y venga de hablar
de un para�so perdido.
Yo en su lugar
cerraba el bar.
�Taxi!, �taxi!