Letra de Plomo En Los Bolsillos - Marea
Letra de canci�n de Plomo En Los Bolsillos de Marea lyrics
La sed, remite y me repite cuando est�s
cortando las aletas del salm�n
que el r�o s�lo quiso azulejar
para que no mordiera con fauces de rat�n,
que no hacen mucha mella pero van
royendo las ra�ces cuando dices que te vas
en busca de otras alas que te ayuden a cruzar
con plomo en los bolsillos,
rob� el grano a la gallina y al halc�n,
lo siento, pero tuve que correr,
ven�an los demonios hacia aqu�
cargando las trompetas,
y desde que no est�s, despinto pesadillas para ti,
no caben m�s pecados en tus manos y, aun as�,
recoges hasta el musgo que amuralla mi pesar,
que blinda mi esqueleto,
https://www.coveralia.com/letras/plomo-en-los-bolsillos-marea.php
no le hagas caso al barquero,
que en volandas no te llevar� si le faltan los besos,
que agazapado est� como verruga ardiendo
que no ha de morir y que espera el momento
para rebrotar,
busqu� refugio en otros lares y, al serrar
mi sue�o tan despacio despert�
en el prado bald�o donde est�n
muriendo los corderos,
por eso regres�, m�s �spero y cansado a este comp�s
que marcan las agujas pregonando que viv�
entre tanto alboroto que no me par� a escuchar
el crujir de retamas.
cortando las aletas del salm�n
que el r�o s�lo quiso azulejar
para que no mordiera con fauces de rat�n,
que no hacen mucha mella pero van
royendo las ra�ces cuando dices que te vas
en busca de otras alas que te ayuden a cruzar
con plomo en los bolsillos,
rob� el grano a la gallina y al halc�n,
lo siento, pero tuve que correr,
ven�an los demonios hacia aqu�
cargando las trompetas,
y desde que no est�s, despinto pesadillas para ti,
no caben m�s pecados en tus manos y, aun as�,
recoges hasta el musgo que amuralla mi pesar,
que blinda mi esqueleto,
https://www.coveralia.com/letras/plomo-en-los-bolsillos-marea.php
no le hagas caso al barquero,
que en volandas no te llevar� si le faltan los besos,
que agazapado est� como verruga ardiendo
que no ha de morir y que espera el momento
para rebrotar,
busqu� refugio en otros lares y, al serrar
mi sue�o tan despacio despert�
en el prado bald�o donde est�n
muriendo los corderos,
por eso regres�, m�s �spero y cansado a este comp�s
que marcan las agujas pregonando que viv�
entre tanto alboroto que no me par� a escuchar
el crujir de retamas.